Durante los momentos del confinamiento más duro, aprovechasteis para reflexionar y hablar con el cliente. ¿Qué valor tienen la escucha activa? La escucha activa tiene un grandísimo valor, pero suele estar abajo en la lista de prioridades en una empresa, por eso fue el confinamiento, que nos obligó a cerrar el servicio, lo que nos brindó esa oportunidad. A nosotros nos permitió tener una conversación más pausada con el cliente llegando a extraer ideas más elaboradas, muy difíciles de obtener en una encuesta o en un rating.